Antes de caer en el atracón: respira!

Tal como lo dice el titulo de esta entrada, respirar antes de caer en un atracón a mí me ha funcionado para evitar dar el primer paso, ese paso que nos lleva hasta el fondo del hoyo.

No les hablo de ciencia sino de experiencia y sé muy bien que suena más fácil decirlo que hacerlo y es que no sólo se trata de respirar.

Respirar es el primer paso para oxigenar las ideas y poder darse unos segundos de calma, una vez que se entra en esa calma se puede buscar un sustituto de ese bocado ( o lo que sea) que queríamos comer y pasar a otra cosa.
Hay que saber que si salimos airosas de este ejercicio, esto no nos asegura que las ganas no vuelva... por lo que he observado en mí ( la mayoria de gente se controla frente a los demás y es a solas en que se dan los atracones) cuando me dan las ganas de atacar una barra de chocolate la lucha se prolonga  durante todo el día.
Hay otras veces en que tengo ganas de algo salado, en esos casos uso un poquito de sal en la lengua para compensar y la mayor parte de veces prefiero tomarme un té caliente con edulcorante  o beber agua y luego las ganas de darme un atracón desaparecen.

Hasta aquí parace fácil,  pero quedan esos días en que no hay fuerza de voluntad y la ansiedad nos dispara a mil las ganas de comer, en esos casos lo que mejor me funciona es llenarme el estomago de claras de huevo cocidas, té y bebidas de dieta porque  "si solo pruebo" no puedo controlarme, esos días me depasan.


Que tengan un buen martes